Mientras que te visualizas como la madrastra de la Cenicienta, todo puede cambiar. La primera, la excesiva tendencia por la parte de los familiares, en especial de los progenitores, de meterse en los temas privados de la pareja, de “sus hijos”. La segunda, la incapacidad de los integrantes de la pareja de independizarse totalmente de sus propios progenitores. Acabo de tener un hijo con mi pareja y han comenzado los inconvenientes con la familia de ella. Su madre quiere estar presente en todo y no consigo que mi mujer entienda mi posición. No poseemos privacidad, y parece que sea ella la que educa a nuestro hijo y la que lo sabe todo.
Si eres una persona alegre y en ese momento eres la más amargada del mundo, es difícil que tu pareja te reconozca como la persona de la que está enamorado y, por extensión, que se lo trasmita a sus padres. ¿Tenemos la posibilidad de admitir a la familia de nuestra pareja hasta tal punto que parezca que nos hemos “casado” con ellos? Ni que estén presentes hasta en nuestra alcoba ni que no los observemos nunca. Más allá del afecto que tengas por ellos, la pareja ha de estar lo suficientemente “impermeabilizada” para no dejar que terceras personas se entrometan en las decisiones y la vida de pareja. Para simplificar, vamos a ponernos en el lado de una pareja que decidió que es el instante realizar las presentaciones familiares. Saber a la familia política puede ocasionar tensión porque las personas aceptan que están ante un contexto de evaluación.
¿qué Cosas Puedo Realizar Para Llevarme Mejor Con Mi Familia Política?
Con lo que, la mayoria de las veces va a ser mejor que los problemas con tu pareja, los resoluciones con tu pareja. Hay varias personas que, frente a un inconveniente o una discusión con su pareja, llaman por servirnos de un ejemplo a su madre para contárselo o para pedirle consejo. Esto, que es bastante frecuente que se lleve a cabo, puede ocasionar varios inconvenientes. Más allá de que resulte a veces difícil, es importante no desatender a la pareja y seguir distribuyendo tiempo juntos. “Hay momentos para todo. A veces simplemente basta con sacar tiempo del día en el que disfrutar de la compañía del otro. Por ejemplo, disfrutando de una copa de vino y una buena conversación en el momento en que los pequeños se acuestan”.
Pero no sabemos de que su intromisión o su falta de límites es asimismo compromiso nuestra, no solo de nuestra pareja o de ellos mismos. Somos nosotros los que nos ponemos disculpas o elevamos barreras de temor que dejan todo ese malestar. De este modo, y en caso de tener una relación con la familia política algo tensa y con algún que otro combate desavenencia de por medio, lo idóneo sería resolverlo lo antes posible y no permitir que esa situación se vuelva crónica.
Mi Pareja Antepone A Su Familia
Una aceptable comunicación garantiza el buen funcionamiento de una pareja. Te voy a contar ciertos y me dices si te has sentido identificada o reflejado. Normalmente lo que para uno es normal, para el otro puede ser molesto. Y las discusiones para defender quien tiene la razón no acostumbran a dar como resultado un convenio que sea posible para los dos. MundoPsicologos no proporciona consejo médico, diagnósticos ni tratamientos.
Lo que mejor frecuenta funcionar en estas situaciones es entablar unos límites que le queden clarísimos a la familia. Y, entablar límites, significa que la familia sepa muy bien, hasta dónde tienen la posibilidad de llegar, y desde dónde no tienen la posibilidad de ofrecer ni un paso. Pero esto, es conveniente llevarlo a cabo desde el primer momento en que se siente la intromisión, si no se hace de esta forma, después será mucho más difícil.
Cuando la familia afecta a la relación de pareja y se cruzan los límites de nuestra privacidad, debemos encararnos al reto de reconducir la situación sin dañar. Yo estoy comenzando una relación con alguien que me solicitó ser su novia desde el primer día que me conoció y que quiere presentarme a su familia desde ese momento. Semeja irónico, en ocasiones uno desea estar con alguien que te de ese sitio y ese momento nunca llega, pero cuando una persona que ni siquiera te conoce te solicita algo de este modo, entonces te percatas que algo no anda bien. Las relaciones de pareja no son entidades separadas y recluidas del resto de personas.
Por otra parte, que nos llevemos mal o bien es dependiente de múltiples factores, por el hecho de que si hay algo que todos sabemos es que cada familia es un mundo. Una cosa es vivir a cientos y cientos de kilómetros de los suegros y cuñados y algo muy distinta es comunicar la misma casa o estar a dos manzanas de distancia. En el momento en que la familia perjudica a la relación de pareja los cimientos tienen la posibilidad de balancearse si no se charla sobre el tema. En el caso de que tengas hijos, ellos no tienen la culpa de toda esta situación. Conque no les prives de esto, y llévales a verlos, si bien sea sin la compañía de tu pareja.
Establecer una aceptable relación con la familia política o, por contra, sentir que no se encaja con ella en absoluto, depende en buena medida del tipo de personas y de activas que nos hallemos. Hay familias excesivamente cohesionadas y dependientes, que pasan todo su tiempo juntos y solamente dejan espacio para la intimidad de pareja. Hay otras que tratan de entrometerse y manejar constantemente y otras que son un pozo de negatividad y crítica.
Al estar con otro, tanto sus amigos, como su profesión o su familia pasa a ser también parte de nuestra vida. Esto puede enriquecernos, sumar en nuestro confort y alimentar nuestra vida, pero no en todos los casos es tan fácil ni positivo. Los suegros son una de esas partes que se tienen dentro en nuestras relaciones ypueden complicarnos la presencia. En verdad, en algunos casos, tienen la posibilidad de llegar a detonar roturas y divorcios.